La Feria Internacional del Mueble, abrio su escaparate internacional el pasado lunes en Valencia. Valencia esta de moda en Europa, y en el mundo. Su preciosa ciudad ha conquistado la Americas Cup, la Formula I y su predilecto hijo Calatrava, ha hecho de las suyas entre el Palau y la ciudad de las Artes y Ciencias.La Feria, fuera de circuitos internacionales, pasa por ser la tercera del mundo después de Cologne y Milan, e intenta por todos los medios escalar el puesto que parecia abandonaba la alemana y que Milan despreciaba. Han creado unas magnificas instalaciones, aunque algo incomodas para el visitante y regular señalizadas, que han culminado en una Feria para el futuro. Lastima que la recesion reinante la haya situado de nuevo en su puesto, habiéndose coronado Milan y reforzado la Tedesca.Este año, ha tenido un retroceso en expositores por primera vez y es que las Ferias, han dejado de ser lo que el espiritu para lo que fueron creadas deberían.Son un negocio mas, con intereses propios mas alla de los intereses del sector o de la Region a la que un dia representaban. Van a ganar dinero y sus clientes son los expositores y los visitantes. A un precio por m2 semanal desorbitado, a un precio de bares y restaurantes muy altos, a un precio de aparcamiento muy elevado, e incluso a un precio de acceso a profesionales disuasivo, intentan que sus cuentas cuadren luego de dotar grandes sumas a gastos de directivos.Asi y todo, la ilusion que genera esta Feria es inconmensurable. Los Stands de los expositores cuidadísimos y ofreciendo lo mejor del diseño y producción que atraiga la atención de los visitantes. La casa de Marilyn, o de Leonardo, como se la imaginan los diseñadores mas actuales, la vanguardia y el rejuvenecimiento del clásico, las grandes decoraciones y los mausoleos para el mercado Ruso o Arabe, hacen de ella un espectáculo digno de ver, sin olvidarnos de que miles y miles de familias viven del sector.A resistir y a ganar.
L. Soriano.
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