19 agosto, 2006

ONU... Y OTAN.-

La Sociedad de Naciones, mas tarde llamada Organización de Naciones Unidas, es sobre todo un delicado equilibrio de naturaleza inestable. Una muy grande y carisima “olla de grillos”, que en nombre de la unión y la solidaridad, unas veces comete, otras omite, pero nunca, nunca, al parecer acierta.
Su mayor problema es su gran ambigüedad y la falta de profundo ideario o criterio propio, que debería desembocar en inequívocas conclusiones con las consiguientes clarísimas decisiones.
El enfrentamiento entre los que pagan, incluso y sobre todo entre ellos y los que van a remolque, así como los que presionan para imponer sus voluntades sin reunir los mínimos requisitos de credibilidad o representación es patètico.
La ONU, como Parlamento Folclórico Universal, con sus distintas razas, colores, costumbres y culturas, es un espectáculo sorprendente y supongo que positivo. Sin embargo, esto no debe de ocultarnos la verdadera naturaleza del ser humano. Ningún foro puede funcionar sin unas normas, reglamentación, e incluso una homologación, desde el lenguaje hasta la oportunidad de ciertas declaraciones, o las medidas de las intervenciones.
¿Como entonces puede funcionar este Foro de Foros sin ninguna clase de verdadera afinidad en la base?
¿Se debería de formar dos ONU¨s?.Una Universal que no signifique nada más que peculiaridad y colorido, pero sin fondo ni trasfondo, y otra más homogénea, por ejemplo una ONU democrática,sólo de democracias, por poner un ejemplo de consenso Universal mayoritariamente aceptado, aunque no seguido.
La Democracia,” El peor de los sistemas, si se exceptúan todos los demás”, al menos nos indica, con mas o menos verosimilitud, que a quien nos mandan al Foro es representante de la Mayoría del Pueblo, y que cada cierto tiempo, puede que nos lo cambien.
Sin entrar en escabrosos detalles, deTerrorismo,Tiranias,Dictaduras Populistas, que no populares, Lapidaciones y Ablaciones, oscurantistas costumbres y religiones, discriminaciones de genero o de raza, y otros menores, pero no menos a tener en cuenta, como cerrilismos ,belicismos, prepotencias, e imperialismos soterrados o no, expansionistas o económicos.Deberíamos reflexionar y no dejar que los violentos soñadores del pasado, o simplemente, depredadores humanos, tengan un lugar y un voto en un foro, y mucho menos cargos y representaciones significativas, a veces lacerantes.
Homologuémoslo pues y, hagamos que, si quieren venir a dialogar, cumplan unos requisitos mínimos aceptables y aceptados, para lucir sus palmitos y sus penachos. Hagamos de esto una bandera por un mundo mejor.
Sorlo@step.es L. Soriano.
La ONU ha demostrado ser un gigante muy gastoso y un nido de corruptos. La Organización se mantiene gracias a la desproporcionada aportación de los Estados Unidos, quienes contribuyen mucho mas que cualquiera de los otros países miembros y, en la Asamblea General, tiene un voto como el resto. Es verdad que posee derecho de veto en el Consejo de Seguridad, pero también que los otros países – China, Rusia, Gran Bretaña y Francia – que tienen el mismo derecho, aportan, así mismo, mucho menos que la gran nación americana. Por otra parte, carece de sentido que países como Irán, Siria, Corea del Norte, Cuba, Venezuela, o Sudan, por poner algún ejemplo, ostenten la misma representatividad que Alemania, Canadá o Australia, cuando sus decisiones dependen del pie con el que el “mandón” de turno se levante cada mañana.
Por todo lo expuesto, no sería de extrañar que, cualquier año de estos, los Estados Unidos decidiesen abandonar la ONU – es decir, la “dejasen caer” – para fundar una Liga de Naciones Democráticas.
Respecto de la OTAN, la amenaza global del Islam, reduce al absurdo la limitación al Atlántico Norte del ámbito de la Alianza. Como propuso nuestro Presidente Aznár – la cabeza mejor de España, en relación con la Política Exterior – se hace necesaria una reforma del Pacto – idealmente en el seno de la citada Liga - incorporando a países como India, Japón, Australia o Nueva Zelanda. Está muy claro que se contaría con las reticencias francesas – al menos en la Francia de Chirac, no sabemos si también en la de su Ministro del Interior – y de algún otro país de la Unión Europea, pero dado que la creación de una verdadera fuerza disuasoria por parte de esta resulta de todo punto imposible, los europeos, mas tarde o mas temprano, acabaremos coincidiendo en situarnos, con carácter definitivo, hasta que “escampe” en los campos islámicos, “bajo el paraguas” norteamericano. Y “eso”, conlleva ciertos costes de independencia de decisiones exteriores.
En relación con España, es impensable que los Rodríguez, Moratinos etc. estuvieran por la labor, pero también considero impensable que – después de la que están “liando” – los españoles vuelvan a depositar su confianza en “mindundis” de clase alguna, a menos que, mayoritariamente, decidan hacerse el harakiri. Puede que “la cosa” se ponga tan mal, que terminemos por llamar a Aznár, a gritos, como los británicos hicieron lo propio con Churchill, cuando Hitler comenzó a hacer de las suyas; el antes denostado Winston, se convertía en el hombre del momento, porque la mejor Alianza de Civilizaciones es derrotar al Islam y volverlo a colocar, en cuanto a poderío y amenaza virtual, donde está situado ideológicamente: en la Edad Media.
José Ignacio.

No hay comentarios: