EL PATIO DE MONIPODIO. SILVA CULPA A LA JUNTA.-Resulta que, en su día, en Sevilla hubo de celebrarse una eliminatoria de Copa Davis, “a como diera lugar” porque, en Málaga, habían tenido lugar dos y, al decir de algún conspicuo sevillano, “eso no se puede tolerar”. Como quiera que había de celebrarse en invierno, la Federación Internacional, exigió pista cubierta y – como no existía tal cosa – hubieron de improvisar una cubierta de estructura metálica sobre el Estadio Olímpico – de la Olimpiada que nunca existió - la cual, terminados los tres días de competición, fue arrumbada, sin vigilancia, en donde primero “les pilló”. Ni que decir tiene que fue un gasto enorme, inútil y sin valor de futuro. Pero en Sevilla “también” se había celebrado una eliminatoria: solamente una, pero era la final.
Ahora, el delegado de Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Sevilla, Francisco Manuel Silva (IU), culpó a la Junta de Andalucía de que la cubierta de la final de la Copa Davis de 2004 permaneciera almacenada más tiempo de lo que habían previsto en la parcela de Sevilla Este de la que se sustrajo para ser vendida a distintos chatarreros de la ciudad y la provincia. De este modo, el máximo responsable del Instituto Municipal de Deportes (IMD) se descargó de parte de su responsabilidad en las explicaciones que tuvo que dar a los dos grupos de la oposición, PP y PA, en el consejo de gobierno extraordinario del IMD celebrado el pasado 5 de mayo, alegando en uno de los párrafos del documento que entregó a los grupos que la actuación del Ejecutivo regional provocó que la estructura tuviera que estar más tiempo del que estaba programado en el solar anexo al Palacio de Exposiciones.
En concreto, Silva hace referencia al retraso en la llegada del dinero de las arcas autonómicas para acometer la obra de reutilización de esos materiales, esto es, la construcción de dos pabellones deportivos en la avenida de La Paz y en Sevilla Este. Una vez detalla en los primeros párrafos del documento, al que ha tenido acceso este diario, la compra de la estructura por 228.000 euros, el «valor real en ese momento» y el proyecto de nuevo uso de la misma, el delegado expone que «la insuficiencia presupuestaria derivada de la disminución de las aportaciones económicas de la Junta para la construcción de equipamientos deportivos provocó la imposibilidad de acometer en los plazos previstos la construcción de los dos pabellones, por lo que la cubierta siguió en dicha parcela». Esto es, que no se dio traslado a los materiales antes porque no se habían aprobado las financiaciones para levantar los dos nuevos recintos deportivos.
La cubierta ha sido encontrada – troceada – en manos de chatarreros en barrios marginales de la ciudad o formando parte del “exorno” de algunas chabolas. Se sabe que aun no se ha recuperado toda la cubierta, porque, pesados los trozos encontrados, así queda acreditado. ¡Que arte!
Ahora, el delegado de Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Sevilla, Francisco Manuel Silva (IU), culpó a la Junta de Andalucía de que la cubierta de la final de la Copa Davis de 2004 permaneciera almacenada más tiempo de lo que habían previsto en la parcela de Sevilla Este de la que se sustrajo para ser vendida a distintos chatarreros de la ciudad y la provincia. De este modo, el máximo responsable del Instituto Municipal de Deportes (IMD) se descargó de parte de su responsabilidad en las explicaciones que tuvo que dar a los dos grupos de la oposición, PP y PA, en el consejo de gobierno extraordinario del IMD celebrado el pasado 5 de mayo, alegando en uno de los párrafos del documento que entregó a los grupos que la actuación del Ejecutivo regional provocó que la estructura tuviera que estar más tiempo del que estaba programado en el solar anexo al Palacio de Exposiciones.
En concreto, Silva hace referencia al retraso en la llegada del dinero de las arcas autonómicas para acometer la obra de reutilización de esos materiales, esto es, la construcción de dos pabellones deportivos en la avenida de La Paz y en Sevilla Este. Una vez detalla en los primeros párrafos del documento, al que ha tenido acceso este diario, la compra de la estructura por 228.000 euros, el «valor real en ese momento» y el proyecto de nuevo uso de la misma, el delegado expone que «la insuficiencia presupuestaria derivada de la disminución de las aportaciones económicas de la Junta para la construcción de equipamientos deportivos provocó la imposibilidad de acometer en los plazos previstos la construcción de los dos pabellones, por lo que la cubierta siguió en dicha parcela». Esto es, que no se dio traslado a los materiales antes porque no se habían aprobado las financiaciones para levantar los dos nuevos recintos deportivos.
La cubierta ha sido encontrada – troceada – en manos de chatarreros en barrios marginales de la ciudad o formando parte del “exorno” de algunas chabolas. Se sabe que aun no se ha recuperado toda la cubierta, porque, pesados los trozos encontrados, así queda acreditado. ¡Que arte!
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