LOS INQUILINOS RESPONDÍAN CON FRASES CORTAS PERO NO HABÍA CONVERSACIÓN. UN TESTIGO DE LOS GEO DICE QUE NO PIDIERON INTÉRPRETE EN LEGANÉS PORQUE UN POLICÍA "NOS DIJO QUE HABLABAN CASTELLANO".
Las incógnitas que rodean al episodio sucedido el 3 de abril de 2004 en la calle Carmen Martín Gaite de Leganés cobran importancia tras le declaración de un testigo policial perteneciente a los GEO. Además de decir que no había conversación con los terroristas sino voces en árabe, a preguntas del abogado Endika Zulueta dijo que no se pidió la intervención de un intérprete porque un funcionario de la Brigada de Información "nos dijo que hablaban castellano". Declaró también que pese a lanzar gases dentro de la vivienda no se oyó ninguna tos.
El responsable del GEO declaró que fue avisado por su comisario jefe de que había un tiroteo en Madrid y salió hacia Leganés. Dijo que no escuchó el primer tiroteo inicial pero sí el que se produjo durante la intervención y que escuchó voces en árabe (aclaró que no sabía árabe, que suponía que era este idioma) y en español. El GEO declarante fue el que intentó hablar con los encerrados en el piso y les pidió cuatro veces que salieran. Dijo que de vez en cuando soltaban frases en castellano como "entrad mamones" y oyó voces en árabe y castellano que "se unificaron en un cántico y se produjo la explosión".
Dijo que sabían que los parapetados tenían explosivos porque el comisario de información les había dicho que uno de los supuestos suicidas había llamado a un familiar y le había dicho que había explosivos detrás de la puerta y que si iba la policía lo iban a explosionar.
También declaró que cortaron el gas, el teléfono fijo y la luz pero no pusieron inhibidores de frecuencia porque el GEO "no tiene inhibidores de frecuencia".
Para preparar la intervención contaron con la información que les proporcionó un policía que vivía en el piso vecino. Colocaron una carga con explosivo para neutralizar el posible explosivo detrás de la puerta. "Si tenían una trampa esta se hubiera destruido o hubiera explosionado", relató, y añadió: "Desgraciadamente dentro tenían más explosivos". Tras volar la puerta declaró que les dispararon desde dentro de piso, les conminaron a salir, les respondieron con tiros, se oyeron cánticos y después la explosión. A preguntas de si se oyeron toses dentro tras introducir el gas, el GEO contestó que él no oyó ninguna tos.
Fue el subdirector general operativo quien dio la orden de intervenir. Declaró el GEO que pidió intérpretes pero que el "comisario de la brigada de información sabía que los de dentro hablaban castellano".
Dijo el GEO que no vio a ninguna de las personas que estaban allí y que nunca graban sus intervenciones.
"Yo no sé que es eso de riesgo cero. Yo no oí que nadie lo dijera".
A continuación compareció otro de los GEO que participó en la intervención de Leganés. Concretamente, fue el encargado de colocar la carga controlada en la puerta del piso. Cronológicamente narró que le llamó el comisario jefe en torno a las 17.30 de la tarde. Se dividieron en dos grupos. El segundo, en donde se encontraba él, llegó al piso de la calle Carmen Martín Gaite sobre las 19.30.
El agente explicó su misión en concreto: volar la puerta del inmueble donde se encontraban los presuntos terroristas. Para ello colocaron una carga controlada, "que es una carga muy pequeña", y la hicieron explosionar desde el exterior del edificio. Una vez que echaron la puerta abajo tomaron posiciones en el rellano y en las escaleras del portal.
"Estábamos todos en tres metros cuadrados", por lo que estaban muy cerca de la entrada. Este agente declaró que él no llevaba inhibidores de frecuencias y que "yo sepa mis compañeros del GEO tampoco". Pero a diferencia de otras de las declaraciones realizadas por sus compañeros ante el tribunal, dijo que "no estudiamos la distribución propiamente dicha del piso".
A la pregunta de si oyeron voces en el interior del piso, contestó que sí y que en ambas lenguas (árabe y castellano) "A mí me dio la impresión de que era gente que estaba muy exaltada y que no nos iban a hacer caso". No sabe dónde podía estar la carga que hizo volar el inmueble, pero sí aseguró que, en el caso de que hubiera explosivos tras la puerta, la carga que se utilizó para echarla abajo no hubiera podido explosionarla, "ni por simpatía". Ante las constantes preguntas por parte de la acusación dirigidas a averiguar el por qué de la actuación de los GEO en Leganés, Gómez Bermúdez se vio obligado a recordar que "no estamos juzgando la actuación de los GEO, aquí se juzga otra cosa".
Tampoco oyó que ninguno de sus compañeros le dijera que había riesgo cero. "Yo no sé que es eso de riesgo cero. Yo no oí que nadie lo dijera", dijo.
Las incógnitas que rodean al episodio sucedido el 3 de abril de 2004 en la calle Carmen Martín Gaite de Leganés cobran importancia tras le declaración de un testigo policial perteneciente a los GEO. Además de decir que no había conversación con los terroristas sino voces en árabe, a preguntas del abogado Endika Zulueta dijo que no se pidió la intervención de un intérprete porque un funcionario de la Brigada de Información "nos dijo que hablaban castellano". Declaró también que pese a lanzar gases dentro de la vivienda no se oyó ninguna tos.
El responsable del GEO declaró que fue avisado por su comisario jefe de que había un tiroteo en Madrid y salió hacia Leganés. Dijo que no escuchó el primer tiroteo inicial pero sí el que se produjo durante la intervención y que escuchó voces en árabe (aclaró que no sabía árabe, que suponía que era este idioma) y en español. El GEO declarante fue el que intentó hablar con los encerrados en el piso y les pidió cuatro veces que salieran. Dijo que de vez en cuando soltaban frases en castellano como "entrad mamones" y oyó voces en árabe y castellano que "se unificaron en un cántico y se produjo la explosión".
Dijo que sabían que los parapetados tenían explosivos porque el comisario de información les había dicho que uno de los supuestos suicidas había llamado a un familiar y le había dicho que había explosivos detrás de la puerta y que si iba la policía lo iban a explosionar.
También declaró que cortaron el gas, el teléfono fijo y la luz pero no pusieron inhibidores de frecuencia porque el GEO "no tiene inhibidores de frecuencia".
Para preparar la intervención contaron con la información que les proporcionó un policía que vivía en el piso vecino. Colocaron una carga con explosivo para neutralizar el posible explosivo detrás de la puerta. "Si tenían una trampa esta se hubiera destruido o hubiera explosionado", relató, y añadió: "Desgraciadamente dentro tenían más explosivos". Tras volar la puerta declaró que les dispararon desde dentro de piso, les conminaron a salir, les respondieron con tiros, se oyeron cánticos y después la explosión. A preguntas de si se oyeron toses dentro tras introducir el gas, el GEO contestó que él no oyó ninguna tos.
Fue el subdirector general operativo quien dio la orden de intervenir. Declaró el GEO que pidió intérpretes pero que el "comisario de la brigada de información sabía que los de dentro hablaban castellano".
Dijo el GEO que no vio a ninguna de las personas que estaban allí y que nunca graban sus intervenciones.
"Yo no sé que es eso de riesgo cero. Yo no oí que nadie lo dijera".
A continuación compareció otro de los GEO que participó en la intervención de Leganés. Concretamente, fue el encargado de colocar la carga controlada en la puerta del piso. Cronológicamente narró que le llamó el comisario jefe en torno a las 17.30 de la tarde. Se dividieron en dos grupos. El segundo, en donde se encontraba él, llegó al piso de la calle Carmen Martín Gaite sobre las 19.30.
El agente explicó su misión en concreto: volar la puerta del inmueble donde se encontraban los presuntos terroristas. Para ello colocaron una carga controlada, "que es una carga muy pequeña", y la hicieron explosionar desde el exterior del edificio. Una vez que echaron la puerta abajo tomaron posiciones en el rellano y en las escaleras del portal.
"Estábamos todos en tres metros cuadrados", por lo que estaban muy cerca de la entrada. Este agente declaró que él no llevaba inhibidores de frecuencias y que "yo sepa mis compañeros del GEO tampoco". Pero a diferencia de otras de las declaraciones realizadas por sus compañeros ante el tribunal, dijo que "no estudiamos la distribución propiamente dicha del piso".
A la pregunta de si oyeron voces en el interior del piso, contestó que sí y que en ambas lenguas (árabe y castellano) "A mí me dio la impresión de que era gente que estaba muy exaltada y que no nos iban a hacer caso". No sabe dónde podía estar la carga que hizo volar el inmueble, pero sí aseguró que, en el caso de que hubiera explosivos tras la puerta, la carga que se utilizó para echarla abajo no hubiera podido explosionarla, "ni por simpatía". Ante las constantes preguntas por parte de la acusación dirigidas a averiguar el por qué de la actuación de los GEO en Leganés, Gómez Bermúdez se vio obligado a recordar que "no estamos juzgando la actuación de los GEO, aquí se juzga otra cosa".
Tampoco oyó que ninguno de sus compañeros le dijera que había riesgo cero. "Yo no sé que es eso de riesgo cero. Yo no oí que nadie lo dijera", dijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario